Cada
vez es más común ver que las personas conviven y adoptan perros, animales
domésticos, que harán parte de la familia. La gran mayoría se interesa por la
salud y el bienestar de su mascota. Es por este motivo que Familia Canina ha
decidido brindarles este artículo para saber qué hacer y como reaccionar en
caso de que nuestro perro tenga una emergencia, manteniéndolo vivo mientras se
logra llevar a una clínica veterinaria.
En este artículo canino, usted aprenderá valiosas técnicas de RCP o reanimación cardiopulmonar, para que pueda salvar la vida de su perro.
En este artículo canino, usted aprenderá valiosas técnicas de RCP o reanimación cardiopulmonar, para que pueda salvar la vida de su perro.
Antes
de empezar a realizar RCP a tu mascota, es importante comprobar la respiración
y el pulso del animal. Esta técnica es muy fácil de realizar ya que con solo poner
el dedo índice, en algunas partes del perro como: cara interna del muslo donde
esta ubicada la arteria femoral o por debajo del tobillo, y también en el
pecho. El pulso normal o frecuencia cardiaca de un perro adulto, es entre 60 a
160 ppm (latidos por minuto) y la frecuencia respiratoria es de 20 a 22 rpm
(respiraciones por minuto).Hay otras señales que pueden ayudarlo a evidenciar una alerta. Las encías y labios del perro presentarán un color gris o más oscuro de lo normal en un perro con buena respiración. Las pupilas se encontrarán dilatadas y no responderán a estímulos como la luz o movimiento.
Si
la mascota no respira hay que empezar a ingresar aire por su boca o nariz. Acompañando
e intercalando con las compresiones del pecho en caso de no presentar pulso.
Cuando la mascota no respira
Hay
una técnica llamada “Maniobra de Heimlich” la cual consisten en desbloquear
vías respiratorias, que en ocasiones pueden estar obstruidas. Girar al perro
boca abajo y con su espalda contra tu pecho. Rodea al perro con tus brazos,
entrelazar las manos justo debajo de su caja torácica (donde finalizan las
costillas y empieza el abdomen). Utiliza tus brazos para darle entre 5
compresiones fuertes. Se prosigue a verificar si en las vías respiratorias o en
la boca se encuentra algún objeto. Si lo encontramos lo retiramos y continuamos
con algunas respiraciones artificiales más hasta que el animal respire por si
mismo.
Cuando la mascota no tiene pulso
Hay
que posar al animal sobre el costado derecho y colocar nuestras manos, con
dedos entrelazados, sobre las costillas. Comenzar con las compresiones
torácicas, esta técnica no se debe realizar si el animal presenta pulso.
Repita el procedimiento.
Compruebe
el pulso durante un minuto y después de algunos intentos de RCP. Hay que
continuar dando respiración cardiopulmonar hasta que el perro presente un
equilibrio en sus signos vitales (pulso y respiración). Dejar de realizar RCP
pasados 30 minutos sin respuesta o reacción alguna.
Siempre
es recomendable ejercitar adecuadamente a tu mascota y brindarle una
alimentación y nutrición saludable. Cuando se presente un caso de emergencia es
importante llevar cuanto antes a tu mascota al veterinario.
IMPORTANTE:
Siempre es recomendable llevar nuestra mascota a un medico veterinario, para
que nos de un diagnostico de la situación.
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